Universitario de Deportes alcanzó la gloria del tricampeonato nacional este domingo al imponerse 2-1 sobre ADT en el Estadio Unión Tarma, marcador suficiente para asegurar el Torneo Clausura con tres jornadas de anticipación. (AVANCE).
Conscientes de que la victoria era imperativa para alcanzar el máximo objetivo del campeonato nacional, el conjunto estudiantil mostró desde el inicio una disposición total para encontrar la anotación de forma prematura
Sin embargo, aunque el encuentro tuvo ritmo en sus primeros compases, las oportunidades claras de gol brillaron por su ausencia para ambos conjuntos.
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Al minuto 22, los merengues inauguraron el marcador mediante una buena definición de Álex Valera. Pese a la euforia del festejo, la anotación fue invalidada por el árbitro Kevin Ortega, quien después de consultar el VAR detectó que el atacante crema había controlado el esférico con el brazo previo a la conversión.
Cuando el acto inicial llegaba a su fin, la celebración fue para el elenco local después de que Anderson Santamaría, en su intento por rechazar una jugada de riesgo, envió el balón a su propia portería para establecer el 1-0 favorable a ADT.
Segunda mitad con mayor presión crema
Durante el complemento, el cuadro estudiantil intensificó su ofensiva buscando igualar las acciones en el marcador. El ecuatoriano José Carabalí se consolidó como la principal amenaza ofensiva, superando constantemente por el sector izquierdo a Jhon Narváez.
Al minuto 49, Carabalí cae dentro del área tarmeña y el juez principal decreta penal. Otra vez el VAR le enmendó la plana y lo llamó para que revise la jugada.
Después de analizar las imágenes, Kevin Ortega rectificó su determinación inicial y mostró cartulina amarilla al jugador merengue por fingir.
La recompensa para los actuales monarcas del fútbol peruano arribó en el minuto 57 mediante Matías Di Benedetto, quien de cabeza convierte el 1-1.
La remontada se consolidó en el tramo final
El equipo conducido por Jorge Fossati comprendía que necesitaba una anotación más para alcanzar el título, por lo que avanzó sus líneas en procura de ese tanto decisivo.
El estadio tarmeño explotó de algarabía en el minuto 78, cuando Álex Valera apareció en toda su dimensión para decretar el 2-1 con un cabezazo de palomita tras un cobró de tiro libre.
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