Conocida como la “chapodipoutada”, Lucero Guadalupe Sánchez, exlegisladora de 24 años, no solo fue involucrada por sus extrañas visitas al excapo de Sinaloa, Joaquín “Chapo” Guzmán en la cárcel de Nueva York sino que la semana pasada fue encarcelada tras ser acusada de traficar cocaína a EEUU, en una historia donde se mezclan el crimen organizado y las aventuras de alcoba.
Esta narconovela es aún más insólita si se tiene en cuenta que Lucero Guadalupe Sánchez había logrado lo que nadie en su tierra natal ,el convulsionado Sinaloa, a ser elegida a los 24 años de edad como la como la diputada más joven en un estado considerado como el feudo de Joaquín “Chapo” Guzmán y escenario de la guerra cruenta entre los carteles de la droga.
Siempre quiso dedicarse a la política y parecía que estaba cumpliendo su objetivo, hasta que la sombra del “Chapo” Guzmán se cruzó en su camino y ahora es procesada por narcotráfico en EEUU donde podría recibir una condena de hasta 20 años de prisión.
La historia “secreta” de Lucero Guadalupe salió a la luz pública el diario azteca Excélsior, informó que la joven diputada se había divertido a sus anchas en una fiesta con Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, en ese entonces el hombre más buscado en México y Estados Unidos.
El capo del cartel de Sinaloa, era conocido también por sus andanzas amorosas. Incluyendo modelos, reinas de belleza y actrices de cine, lo no era obstáculo para que cumpliese con Emma Coronel, su esposa desde 2007, por lo que surgieron comentarios de un tórrido romance con la legisladora, a la que en México se la empezó a conocer como la “chapodiputada”.
Para agitar aún más las versiones idílicas, el 4 de noviembre de 2014 fue captada por las cámaras de seguridad del Penal de Máxima Seguridad del Altiplano, cercano a la capital mexicana, adonde presuntamente ingresó con un acta de nacimiento y una credencial para votar falsas para visitar al capo.
Con un aplomo digno de mejor causa, Lucero no dio importancia a lo que llamò “chismes” hasta que en abril de 2015 as autoridades carcelarias presentaron ante la Fiscalía Federal una denuncia en su contra por el uso de documentos falsos.
No perdió la calma y 14 de enero de 2016 accedió a una entrevista en Radio Fórmula Sinaloa, donde dio respuestas muy vagas sobre su relación con el capo, remarcando que para ella lo que dijeran los medios de comunicación no contaba.
“Yo pienso que es otra cortina de humo para desviar la atención de las noticias, para desviar lo más importante que está pasando en el país como es la Economía”, dijo en una especie de libreto tan usado por los sospechosos de corrupción.
La diputada retó a quienes la relacionaron con “El Chapo” a presentar pruebas tanto de que había pasado con él las fiestas de Año Nuevo en 2016 en el municipio de Guamúchil, como de que era la madre de uno de sus hijos que había nacido en Estados Unidos.
A pesar de que las autoridades penitenciarias habían presentado fotografías suyas ingresando al penal, negó conocer al fundador del Cártel de Sinaloa, “lo he visto en ocasiones, pero no de cerca”.
También llegó a negar cualquier relación y pidió que la autoridad actuara en caso de existir algo en su contra.
“De nueva cuenta reitero que actúen conforme a derechos y no a filtraciones ridículas. Asimismo, interpondré un recurso en la Comisión de Derechos Humanos por daños a mi persona, a mis hijos y a mi familia”, expresó.
Ante las evidencias en contra suya finalmente admitió ante la prensa que sostuvo una llamada con el capo de Sinaloa, quien desde la cárcel le habría pedido asesoría ante los presuntos ataques que sufrieron sus hijos menores de edad por los allanamientos de la Marina en sus propiedades.
Sin la protección constitucional que le daba el ser legisladora, la “chapodiputada” fue detenida en México el 20 de enero de 2016 para ser liberada 23 horas después y luego desaparecer del escenario público.
Diputada rodeada de violencia
En 2013 se convirtió en diputada local por el Partido Acción Nacional (PAN) por el distrito XVI de Sinaloa, donde presuntamente fue la única interesada en postularse.
Pese a que militó en las ligas juveniles del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI), carecía de cualquier experiencia política.
Uno de sus presuntos padrinos políticos, el panista Edgardo Burgos Marentes, renunció al partido poco después de salir a la luz la visita de Lucero al capo, según informa la prensa azteca.
Estudió abogacía, tiene una especialidad en ciencias penales y antes de ser diputada trabajaba como gerente de compras de una inmobiliaria en Culiacán llamada Enigma Bienes raíces S A de CV.
Desde que llegó a la diputación, su historia estuvo marcada por la violencia: en enero de 2014 su hermana María Carolina fue asesinada con un cuchillo por su pareja.
Un año después, su ex marido Rubén Chávez, fue acribillado afuera de su domicilio por un comando que portaba armas AK 47.
El abogado de Lucero, Francisco Verdugo Fierro dio a conocer que a raíz de su detención en EEUU, cuando intentaba ingresar al país, se le notificó que en enero de 2013 se abrió en contra de su cliente una investigación por conspiración para traficar drogas y lavado de dinero para el cártel de Sinaloa.
Entre las pruebas en su contra figuran llamadas telefónicas interceptadas y el presunto ingreso de 5 kilos de cocaína a Estados Unidos mientras que en México todavía tiene abierto el proceso por supuesta falsificación de documentos.
Intentó pedir “asilo político”
Asediada por la prensa azteca y las denuncias judiciales, Lucero Guadalupe Sánchez, no tuvo mejor idea que escapar a Estados Unidos para pedir “asilo político” y fue detenida durante la mañana del 21 de junio en la garita instalada en el puente fronterizo Cross Border Xpress (CBX) en Otay Mesa, que une al aeropuerto de Tijuana y al condado de San Diego.
En ese punto de inspección, un agente de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (CBP) se enteró que Sánchez López era acusada por conspirar para traficar 5 kilos o más de cocaína hacia EEUU y lavar dinero para el cartel dirigido por ‘El Chapo’ Guzmán.
La investigación, que desde enero de 2013 le seguía los pasos a la exdiputada, se originó en la ciudad de Nogales, en el estado de Arizona.
“Durante el curso de la investigación, los agentes se enteraron que la persona conocida como ‘Piedra’ y después identificada como Sánchez López, y su hermana (no se reveló el nombre), conocida entonces como ‘Caro’, estuvieron involucradas en el lavado de dinero y la distribución de productos relacionados con las drogas y por actuar de otra manera en favor de una conspiración para el narcotráfico, para Guzmán Loera y otros líderes del cartel de Sinaloa”, señala la acusación desclasificada este jueves.
El pasado jueves , Sánchez López fue presentada ante un tribunal federal en San Diego, donde se le notificaron los cargos que pesan en su contra. Ella continúa bajo custodia ante el riesgo de que escape, informó el Distrito en el sur de California de la Procuraduría General de Estados Unidos. Su próxima audiencia se programó para el próximo 29 de junio.