Con el último mes del año viene el final de la temporada para el año deportivo. Están próximas las definiciones en el torneo de fútbol profesional. En semifinales Sporting Cristal enfrentará al Deportivo Municipal; y Universitario chocará con Melgar FBC. Los ganadores de esas llaves lucharán por el título 2016.
Los hinchas tienen motivos para esperar resultados de cualquier índole. Los cuatro equipos vienen con campañas irregulares y en estos encuentros suelen avanzar quienes consiguen sincronizar las palpitaciones de la tribuna, las pulsaciones del plantel y los latidos del comando técnico. Ojalá el torneo se resuelva en cancha y no con turbias decisiones en mesa.
En la Segunda División la corona y el ascenso a la Primera División le corresponderán al ganador del duelo entre Academia Cantolao y Sport Áncash. La institución chalaca ha sido semillero de jugadores y esta vez desea aprovechar su potencial para tener vitrina propia en el balompié rentado. Los ancashinos sueñan con volver a la máxima categoría.
La ‘finalísima’ de la Copa Perú se disputará en un cuadrangular en el Estadio Nacional. Lo animarán Racing Club de Huamachuco (La Libertad), Escuela Municipal Binacional (Arequipa), Sport Rosario (Áncash) y Deportivo Hualgayoc (Cajamarca). El ganador jugará en la Primera el año próximo.
Estas son las caras del balompié local y son la expresión de un sistema que requiere ajustes urgentes y vitales. El fútbol profesional tiene que ser manejado por la Asociación Deportiva de Fútbol Profesional y el balompié de aficionados debe ser prioridad de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).
Y esa división de tareas tan elemental tiene que tener reflejo en la asamblea de bases de la federación. Los dirigentes de ligas no deben normar el fútbol rentado. Primero que ordenen sus instituciones; segundo, que inicien el registro de jugadores en el país; tercero, que demuestren una gestión productiva para llegar al directorio del ente rector.
Justicia deportiva
Golpe de timón en el Consejo Superior de Justicia Deportiva y Honores del Deporte. El doctor Hugo Huayanay, representante del Colegio de Abogados de Lima, asumió la presidencia en reemplazo del cuestionado Juan Silva Pro. Se espera que el nuevo titular acelere los procesos en contra de directivos del Comité Olímpico Peruano (COP), quienes no han rendido cuentas sobre uso de subvenciones del Estado.
Como se recuerda, el presidente del COP, José Quiñones, ha sido emplazado por el IPD, Ministerio de Educación y Contraloría General de la República para que sustente gastos de dinero público por más de 180 millones de soles. Hasta ahora hay un silencio olímpico que amerita la pronta intervención del doctor Huayanay. Se espera que los demás integrantes de ese grupo de trabajo lo apoyen con diligencia y determinación.