Justicia y deporte

 

El recientemente sentenciado expresidente regional de Loreto, Yván Vásquez Valera, formó parte de ese nefasto directorio de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) que encabezó Manuel Burga Seoane, hoy en libertad condicional en Estados Unidos a la espera del juicio por el ‘FIFA Gate’ que afrontará a fines de 2017 en el distrito judicial de Brooklin, Nueva York.

A través de la web* denunciamos del error de nombrar a Vásquez como presidente de la comisión de menores de la FPF, un capricho que Burga mantuvo hasta el final de su desastrosa gestión. El tiempo ha confirmado que ese sensible grupo de trabajo deportivo estuvo en las manos equivocadas.

El pasado martes Yván Vásquez fue condenado a seis años de prisión efectiva por el caso de la elaboración del perfil del proyecto de alcantarillado para Iquitos. El juez dispuso que el expresidente regional –en forma solidaria con cuatro exfuncionarios también sentenciados– pague 500 millones de soles como reparación civil.

No se trata de hacer leña del árbol caído, pero este caso simboliza el manejó del fútbol entre 1992 y 2014. Ese oscuro periodo empezó con el desaparecido Nicolás Delfino y fue continuado por Burga Seoane. Veintidós años de desaciertos, opacas gestiones y nulos resultados futbolísticos. Quizá el juicio en Estados Unidos ilumine alguna falta adicional o, quien sabe, hasta algún delito del imputado.

Ascue en el ajedrez

Esta sentencia devuelve actualidad al caso del vigente presidente de la Federación Peruana de Ajedrez, Boris Ascue Alagón, quien fue sentenciado por homicidio culposo** a consecuencia de la muerte de dos personas en 1995.

En este caso hubo avances y retrocesos desde la jefatura del Instituto Peruano del Deporte (IPD), hasta que finalmente se confirmó como titular del ajedrez a esta persona. Sin embargo, un sector de la comunidad del juego ciencia considera que fue un exceso del ente rector del deporte nacional darle luz verde a Ascue Alagón.

El deporte, como cualquier actividad con pretensiones de formación humana, requiere que sus representantes presenten hojas de vida sin mácula alguna. No existe justificación alguna para aceptar en el sistema deportivo nacional a personas con antecedentes judiciales.

Eso equivale a confirmar que no existe en el universo de una disciplina determinada alguien intachable para hacerse cargo del máximo cargo, lo cual resulta inaceptable desde todo punto de vista.

Mala nota

Finalmente, y cambiando de tema, la vergonzante conducta de Juan Reynoso, entrenador de Melgar FBC, en la ceremonia de premiación al final del encuentro entre Sporting Cristal y el once mistiano, amerita una sanción ejemplar.

Reynoso olvidó todo aquello que el deporte le infunde a sus cultores: disciplina, autocontrol, respeto, caballerosidad. El técnico del club arequipeño no solo dejó con la mano extendida al presidente de la Federación Peruana de Fútbol, Edwin Oviedo, también le faltó el respeto a millones de televidentes del país y del extranjero.

Un viejo adagio popular señala: lo cortés no quita lo valiente. En este caso, Juan Reynoso no fue ni cortés ni valiente.

* https://www.resistenciacrema.com/2014/09/buleje-mentiras-menores.html

** https://www.tribunahispanausa.com/deportes/el-ipd-se-burla-del-congreso-de-la-republica-y-del-tribunal-constitucional-parar-avalar-a-un-homicida-convicto-como-presidente-de-la-federacion-deportiva-peruana-de-ajedrez/

 

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