Nos hemos preguntado muchas veces ¿qué tanto material necesitan los escolares para tener que llevar enormes mochilas que en algunos casos hasta los propios adultos que los acompañan cargan con dificultad?
Algunos se ríen cuando ven pasar a un niño cargando una mochila que apenas pueden sostener, pues les parece algo cómico. Pero al contrario deberían preocuparse porque es un asunto muy serio.
Para empezar, cuidemos la cantidad de cosas que ponemos en las mochilas, que pueden sobrepasar la resistencia física de los niños. El peso no debe superar la décima parte del peso del estudiante. El exceso produce gran tracción y presión de la musculatura y articulaciones de la columna vertebral así como de los hombros con consecuencias irreversibles a largo plazo. Según el Dr. César Valverde, médico asistente del Instituto Nacional de Rehabilitación puede provocar escoliosis, hernias, cifosis o artrosis precoz. También puede causar disminución del crecimiento, originando baja estatura.
Es muy común llevar la mochila en un solo lado. Esto produce problemas de postura y desviaciones de la columna. El Dr. Valverde recomienda no llevar las asas muy largas sin sobrepasar el cuello ni ir más abajo de la cintura.
Muchos escolares padecen dolores de espalda, brazos y hombros. Una de las razones sería llevar mochilas con peso excesivo. Alerta con los niños que llevan tantas cosas como si se fueran de viaje. Hable con los maestros para que no les obliguen a cargar tanto peso. Al fin y al cabo está en juego la salud de hoy y el futuro de los niños ¿No les parece?