“Vicentillo” Zambada y los secretos de la Coca Nostra

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Hijo del capo del cartel de Sinaloa y uno de los más escurridizos narcojuniors, como se conoce a los hijos de los padrinos de la droga, Vicente Zambada Niebla (a) “Vicentillo” se declaró inicialmente inocente en un tribunal de Chicago y afirmó ser solo un colaborados de la DEA hasta que los fiscales le hicieron una oferta que no podía rechazar y terminó siendo “testigo protegido”.

Ante las evidencias acumuladas, sobre envíos de toneladas de cocaína, procedentes del cartel de Sinaloa que dirige a sangre y fuego su padre Ismael “El Mayo” Zambada, los fiscales  demandaron que se le condene a cadena perpetua…si insistía en seguir declarándose inocente.

Como era de esperarse, “Vicentillo” comprendió que no tenía otra salida que declararse culpable para no morir tras las rejas, por lo que no hizo mayores aspavientos para “cooperar” con la DEA, tal como confirmaron los fiscales federales estadounidenses.

El tantas veces negado primer acuerdo con el que se declaró culpable, establecido el tres de abril de 2013, se detalló de forma pública recientemente en la Corte del Distrito Norte de Illinois, de acuerdo con un comunicado de esa instancia judicial.

“Vicentillo” trató de dosificar sus revelaciones cargando la mano contra los enemigos del Cartel de Sinaloa, como sus acérrimos rivales de “Los Zetas” que desataron una cruenta guerra de la coca, con decenas de decapitados y quemados vivos,  hasta quedar  reducidos como otra banda de menor importancia.

Se le recordó una vez más  que. bajo el acuerdo de culpabilidad, se enfrenta a una pena máxima de cadena perpetua, una sentencia mínima obligatoria de 10 años, y una multa máxima de 4 millones de dólares, por lo que no debía intentar pasarse de listo a esas alturas.

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El ramo de olivo de los fiscales fue reiterar que  “si el gobierno (de EEUU) determina en el momento de la sentencia que Zambada Niebla ha seguido prestando una cooperación plena y veraz, como lo exige el acuerdo de culpabilidad, se reducirá la sentencia aconsejada, de cadena perpetua”.

Entre otros puntos, admitió que en el lapso de 2005 a 2008 era un integrante de alto rango del cártel de Sinaloa, y que encabezó muchas operaciones de tráfico de drogas, por su cuenta y en cooperación con su padre, Ismael “el Mayo Zambada!.

Por lo demás no es de extrañar estas negociaciones si tenemos en cuenta que al menos seis de ochos líderes del narcotráfico extraditados a territorio estadounidense desde 2007 establecieron acuerdos con los fiscales federales , para declararse culpables y reducir sus condenas.

En esa lista figuran Eduardo Arellano Félix, el Doctor; Benjamín Arellano Félix, Osiel Cárdenas Guillén, Héctor el Güero Palma, Miguel Caro Quintero y Mario Villanueva, entre otros buenos muchachos que dicen que se trata de negocios y no es nada personal.

El Vicentillo era el único de los capos extraditados que se había declarado inocente hasta que habló u ahora permanece bajo custodia de Estados Unidos , a donde fue extraditado desde febrero de 2010.

En otro punto del acuerdo, Zambada Niebla se comprometió a no impugnar una sentencia con la que se estableció un decomiso de 1,300 millones de dólares.

Zambada Niebla se declaró culpable de un cargo de conspiración para poseer e intentar distribuir en territorio estadounidense múltiples kilogramos de cocaína y heroína, entre 2005 y 2008.

“La declaración de culpabilidad significa que no habrá juicio para Zambada-Niebla, cuyo caso fue separado del de sus coacusados”, entre los que están su padre, Ismael Zambada (prófugo), y Joaquín el Chapo Guzmán (detenido en México), ambos presuntos líderes del cártel de Sinaloa, de acuerdo con el comunicado de la Corte para el Distrito Norte de Illinois.

Como se recuerda, en abril de 2012 un juez federal estadounidense se negó a retirar los cargos en contra de Zambada Niebla, quien en ese entonces alegaba que tenía inmunidad porque trabajaba como informante de la DEA. una jugada que en realidad camuflaba el inicio de las conversaciones encaminadas al posterior acuerdo

Las confesiones de Zambada

Zambada Niebla confesó que entre mayo de 2005 y diciembre de 2008 él era un miembro de alto nivel del cártel de Sinaloa, y que fue responsable de muchos aspectos de sus operaciones de tráfico de drogas, ‘tanto de forma independiente y como un hombre de confianza de su padre’, para quien actuó como coordinador sustituto y logístico“, según el acuerdo de culpabilidad.

Como era de esperarse también admitió que era consciente de que su padre, el Mayo Zambada, era uno de los líderes del cártel de Sinaloa desde 1970, y que su principal medio de vida derivó de su venta de drogas en Estados Unidos.

Además dijo que el cártel de Sinaloa utilizó vuelos privados, submarinos y otros vehículos sumergibles, buques de pesca, vagones de ferrocarril, además automóviles para realizar el traslado de drogas, desde Centro y Sudamérica, por el interior de México, hasta llegar a Estados Unidos.

“Zambada Niebla también admitió que era consciente de que el cartel usó la violencia e hizo amenazas creíbles de violencia contra cárteles rivales y autoridades en México para facilitar su negocio”, agrega el documento.

Las “confesiones” al jurado son en realidad solo una parte de las revelaciones que suministró a los fiscales federales, especialmente sobre Joaquín “Chapo” Guzmán, procesado en Nueva York y cuyos hijos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán, están bajo la custodia de Ismael “Mayo” Zambada, el padre de Vicentillo.

https://www.youtube.com/watch?v=N_SZ8GL974o

En este enredo mafioso que sería demasiado largo detallar en este capítulo, las traiciones son el pan de cada día por lo que los capos, a la usanza de los príncipes del medioevo, son usados como “carta de garantía” para no hablar más allá de lo que permite la mafia, es decir dosificando los secretos para el ”control  de daños”.

Lo cierto es que, ante las evidencias acumuladas, sobre envíos de toneladas de cocaína, procedentes del cartel de Sinaloa que dirige a sangre y fuego su padre Ismael “El Mayo” Zambada, los fiscales  demandaron que se le condene a cadena perpetua…si insistía en seguir declarándose inocente.

El escurridizo Ismael “Mayo” Zambada, padre de Vicentillo y actual capo del Cartel de Sinaloa, nunca fue detenido.

“Vicentillo” trató de dosificar sus revelaciones cargando la mano contra los enemigos del Cartel de Sinaloa, como sus acérrimos rivales de “Los Zetas” que desataron una cruenta guerra de la coca, con decenas de decapitados y quemados vivos,  hasta ser  reducidos como otra banda de menor importancia.

Se le volvió a advertir que. bajo el acuerdo de culpabilidad, se enfrenta a una pena máxima de cadena perpetua, una sentencia mínima obligatoria de 10 años, y una multa máxima de 4 millones de dólares, por lo que no debía intentar pasarse de listo a esas alturas.

El ramo de olivo de los fiscales fue reiterar que  “si el gobierno (de EEUU) determina en el momento de la sentencia que Zambada Niebla ha seguido prestando una cooperación plena y veraz, como lo exige el acuerdo de culpabilidad”, se reducirá la sentencia aconsejada, de cadena perpetua.

Entre otros puntos, admitió que en el lapso de 2005 a 2008 era un integrante de alto rango del cártel de Sinaloa, y que encabezó muchas operaciones de tráfico de drogas, por su cuenta y en cooperación con su padre, Ismael el Mayo Zambada.

Por lo demás no es de extrañar estas negociaciones si tenemos en cuenta que al menos seis de ochos líderes del narcotráfico extraditados a territorio estadounidense desde 2007 establecieron acuerdos con los fiscales federales , para declararse culpables y reducir sus condenas.

En esa lista están Eduardo Arellano Félix, el Doctor; Benjamín Arellano Félix, Osiel Cárdenas Guillén, Héctor el Güero Palma, Miguel Caro Quintero y Mario Villanueva, entre otros buenos muchachos.

https://www.youtube.com/watch?v=_UN9UGn3aBA

El Vicentillo era el único de los capos extraditados que se había declarado inocente y ahora permanece bajo custodia de Estados Unidos —a donde fue extraditado desde febrero de 2010—, y hasta el momento se no ha fijado una fecha para darle una sentencia a su caso.

En otro punto del acuerdo, Zambada Niebla se comprometió a no impugnar una sentencia con la que se estableció un decomiso de 1,300 millones de dólares.

Después de marchas y contramaechas Zambada Niebla se declaró culpable de un cargo de conspiración para poseer e intentar distribuir en territorio estadounidense múltiples kilogramos de cocaína y heroína, entre 2005 y 2008.

“La declaración de culpabilidad significa que no habrá juicio para Zambada-Niebla, cuyo caso fue separado del de sus coacusados”, entre los que están su padre, Ismael Zambada (prófugo), y Joaquín el Chapo Guzmán (detenido en México), ambos presuntos líderes del cártel de Sinaloa, de acuerdo con el comunicado de la Corte para el Distrito Norte de Illinois.

Las confesiones de Zambada

Zambada Niebla confesó que entre mayo de 2005 y diciembre de 2008 él era un miembro de alto nivel del cártel de Sinaloa, y que fue responsable de muchos aspectos de sus operaciones de tráfico de drogas, ‘tanto de forma independiente y como un hombre de confianza de su padre’, para quien actuó como coordinador sustituto y logístico”, según el acuerdo de culpabilidad.

También reveló que era consciente de que su padre, el Mayo Zambada, era uno de los líderes del cártel de Sinaloa desde 1970, y que su principal medio de vida derivó de su venta de drogas en Estados Unidos.

Además dijo que el cártel de Sinaloa utilizó vuelos privados, submarinos y otros vehículos sumergibles, buques de pesca, vagones de ferrocarril, además automóviles para realizar el traslado de drogas, desde Centro y Sudamérica, por el interior de México, hasta llegar a Estados Unidos.

“Zambada Niebla también admitió que era consciente de que el cartel usó la violencia e hizo amenazas creíbles de violencia contra cárteles rivales y autoridades en México para facilitar su negocio”, agrega el documento.

Las “confesiones” al jurado son en realidad solo una parte de las revelaciones que suministró a los fiscales federales, especialmente sobre Joaquín “Chapo” Guzmán, procesado en Nueva York y cuyos hijos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo, están bajo la custodia de Ismael “Mayo” Zambada, el padre de Vicentillo.

En este enredo mafioso que sería demasiado largo detallar en este capítulo, las traiciones son el pan de cada día por los capos, a la usanza de los príncipes del medioevo, son usados como “carta de garantía” para no hablar más allá de lo permitido por la mafia..

En medio de este escenario la corte federal de Chicago anunció que Vicentillo será sentenciado el 17 de  diciembre de este año y se espera que el juez federal Rubén Castillo , deje de lado la cadena perpetua que le correspondería por sus delitos, le imponga una pena menor de 10 años y una multa de 4 millones de dólares, una bicoca para el cartel de Sinaloa que sigue vivito y traficando cocaína en cantidades industriales.

 

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