Paolo Guerrero cerca de la gloria o el retiro

 

Paolo Guerrero enfrenta un nuevo reto en el fútbol argentino con Racing de Avellaneda.  Será, al parecer, su último tramo de su carrera futbolística con cerca de 40 años en el cuerpo.

Es un enemigo rebelde de los arqueros, un perforador de redes y temible en el área. Ese momento en que palidecían los guardavallas tuvo un pico de eficacia estando en Corinthians, acaso en Flamengo y en el Inter de Porto Alegre su buena estrella empezó a apagarse.

Debido a una lesión de rodilla Paolo Guerrero abandonó el Brasileirao para solucionar su problema médico, con suficiente notoriedad en plena eliminatoria para Catar 2022 cuando en el partido contra Chile en Lima, el Depredador no jugó como solía hacerlo.

Desde ese instante el hijo de doña Peta sabía que no era el mismo y se sometió al cuidado de su rodilla en Alemania y cuando ya se sentía en un nuevo renacer, ancló en el Avaí, nuevamente para jugar el Brasileirao.

El Depredador en Avaí no fue el Paolo que rendía al máximo en el área. Jugó 10 partidos, no anotó un solo gol y ofreció escasas asistencia. Un año deplorable para el capitán de la selección peruana.

Avaí fue una estación de pueblo joven, sin escarchas resplandecientes y escasa fortuna, Guerrero no fue ayuda para el equipo listado y se fue al descenso.

Paolo Guerrero se quedó en el límite de ser o no ser el mismo de siempre. Las puertas se le cerraban. Alianza Lima que el año pasado lanzaba suspiros piadosos de atraparlo y abrirle las puertas de Matute, no pudo crearse un puente para el traslado a La Victoria.

Este año apareció otra vez Alianza Lima, pero con un discurso distinto. En buena cuenta la renovación al Pirata Barcos entrampaba la posibilidad de que Paolo llegar al equipo blanquiazul. El razonamiento lógico, la suma de edades de Barco y Paolo llegaba casi a los ochenta años.

No había entonces un deseo de quedarse con Paolo y las cosas se quedaron en un amor frustrado. Lejos de los ojos y no tan cerca del corazón.

Hasta que una semana atrás todo cambió para Paolo Guerrero con Racing de Avellaneda. Se había iniciado un fuerte lazo que terminará con el viaje de Paolo a Avellaneda para sellar el compromiso.

Ahora queda por saberse si Paolo Guerrero conserva intacto el olfato goleador o que las piernas con el trajín de los años ya no le respondan como antes en sus años de gloria.

Nadie podría adivinar qué es lo que se viene en este 2023 para el capitán de la selección peruana, Acaso, por el bien de él, una exitosa presencia en la Academia y encima que Juan Reynoso vea la necesidad de darle una chance con la bicolor. Vaya uno a saber.

 

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