A estas alturas de las eliminatorias al Mundial Rusia 2018 los que señalan que tenemos posibilidades de clasificar son los eternos optimistas que se amparan en las ya conocidas y consabidas “posibilidades matemáticas” u aquellos dirigentes comprometidos en el proceso que no les queda otra de seguir “vendiendo humo”. Pero todo aquello se va al tacho al revisar la declaración del técnico de la selección de Perú, Ricardo Gareca, a un medio argentino, donde señala que está cerca de encontrar su equipo base. A estas alturas, este “Tigre” no puede salir con esas excusas.
Aprovechemos que estamos en época de recuentos anuales y veamos los diferentes episodios que tan rápidamente nos han marginado de otra Copa del Mundo. Primero la elección de la presidencia de la Federación Peruana de Fútbol, donde entre gallos y medianoche se lanzó Edwin Oviedo y terminó sacando de carrera al candidato de Sporting Cristal, Federico Cuneo. Según entendemos, posteriormente Oviedo se percató de la precariedad de su propuesta, por lo que se rodeó de directivos rímenses que asumen decisiones a diestra y siniestra en el seno de la FPF. El representante “cervecero” es Juan Carlos Oblitas, quien lleva la voz cantante, y es el primer responsable del fracaso.
Las promesas electorales son siempre exageradas, pero sonó mal que un Edwin Oviedo ya elegido ofreciera un entrenador A1, y luego fuéramos siendo desechados por distintos profesionales: Marcelo Bielsa, el portugués Paulo Bento, el brasilero Luiz Felipe Scolari, en fin portazo tras portazo, miradas por encima del hombro, negativas elegantes, y finalmente se escogió dentro de un universo real a Ricardo Gareca. El argentino está intentando hacer un trabajo serio, eso no se lo vamos a negar, pero su contrato es a corto plazo y el fracaso ya se plasmó. Ahora faltan ver algunos resultados positivos que se consiguen en todos los procesos eliminatorios de los últimos años: como por ejemplo ganarle a Paraguay o Venezuela, con esos triunfos no alcanzan, habría que haberle empatado a Colombia (que jugó mal en Barranquilla) o a Chile (sin la cantidad de horrores cometidos).
Lo del equipo base es una tontería, pues cada DT buscará el suyo, siempre habrá jugadores que estén pasados de años, y nuevos rostros. En estos momentos, con la eliminatoria perdida ya no sirve de nada seguir convocando a Claudio Pizarro (así haya agarrado ritmo en el Werder Bremen) o Juan Manuel Vargas (ahora titular del Real Betis), no estarán para las eliminatorias en Qatar, lo mismo pasa con Carlos Lobatón. El cuento de la Copa América Centenario es más humo que otra cosa, con las demás selecciones concentradas en llegar al Mundial, Ricardo Gareca podría imponerse, pero es un título que no nos sirve de NADA.
Juan Carlos Oblitas quiere rearmar el calendario del campeonato 2015, pero ¿por qué hay que permitírselo?, acaso el ex delantero y técnico no es ya culpable de este nuevo fiasco. Antes de venir a revolver todo, debería dar un paso al costado e ir a su casa a disfrutar de su familia. No se puede venir con ideas retrogradas como el agotamiento de Carlos Lobatón que derivó en una lesión y lo marginó de la definición del campeonato. El mediocampista no llegó porque puede tener talento, pero está viejo. ¿Cuántos partidos juega al año Lionel Messi? Hasta más que nuestros futbolistas, y aquí abogan por darles un descansito. Ya entiendo a los que acusaban a Oblitas de paternalista. No avanzamos, retrocedemos.