Entre 2020 y 2024, Demi Moore experimentó uno de los regresos más espectaculares de la historia de Hollywood, culminando con su primer Globo de Oro y una nominación al Óscar por su actuación en «La Sustancia». Pero más allá de los premios, estos años revelaron a una artista que transformó sus desafíos personales en fortaleza profesional, mientras navegaba con gracia la dolorosa enfermedad de su exesposo Bruce Willis.
Los primeros años de esta década fueron relativamente discretos para Moore. En 2020, participó en la serie «Brave New World», aunque su trabajo más significativo llegaría después. En 2022, apareció en «Please Baby Please» y tuvo un cameo en «El Insoportable Peso de un Talento Descomunal» junto a Nicolas Cage. Durante este período, la actriz se enfocó en proyectos selectivos que anticipaban su gran regreso.
Sin embargo, el verdadero hito de 2019 que resonaría en estos años fue la publicación de su memoir «Inside Out». El libro debutó en el número uno de la lista de bestsellers del New York Times en octubre de 2019, estableciendo un precedente de vulnerabilidad y autenticidad que definiría su carrera posterior.
El retorno triunfal: Feud (2024)
En 2024, Moore interpretó a la socialité Ann Woodward en la serie antológica de Ryan Murphy «Feud: Capote vs. The Swans» en FX. Este papel dramático le permitió demostrar su rango actoral en un proyecto prestigioso que exploraba las traiciones del escritor Truman Capote a sus amigas de la alta sociedad neoyorquina.
Moore explicó que «no sabía nada sobre Ann» antes del proyecto y sintió «una gran responsabilidad al interpretar a una persona real». Su compromiso con honrar la verdad del personaje demostró la madurez artística que había alcanzado después de 45 años de carrera.
La sustancia: el papel de su vida
El papel definitivo llegó con «La Sustancia» (2024), dirigida por Coralie Fargeat, donde Moore interpreta a Elisabeth Sparkle, una estrella televisiva de 50 años que es despedida por su edad y decide inyectarse una misteriosa sustancia que promete crear una versión más joven de sí misma. La película, un body horror feminista, se convirtió en un fenómeno cultural.
Moore se reunió seis veces con la directora Fargeat antes de obtener el papel, demostrando que incluso las leyendas de Hollywood deben ganarse los roles. La película se estrenó en el Festival de Cannes 2024, donde recibió una ovación de 11 minutos y ganó el premio al Mejor Guion.
El discurso que cambió todo
En enero de 2025, Moore ganó su primer Globo de Oro tras 45 años de carrera y tres nominaciones previas. Su emotivo discurso de aceptación resonó en toda la industria: «Hace 30 años, un productor me dijo que yo era una ‘actriz de palomitas’, y en ese momento asumí que esto no era algo que me estuviera permitido tener».
Antes de «La Sustancia», Moore confesó haber llegado a un punto donde se preguntaba: «¿Realmente está completo? ¿He hecho todo lo que debía hacer en esto?». El universo le respondió con el papel más desafiante de su carrera.
Moore recibió su primera nominación al Oscar por Mejor Actriz en 2025, compitiendo contra actrices como Mikey Madison, Cynthia Erivo y Karla Sofía Gascón. También ganó el Critics’ Choice Award y el premio del Sindicato de Actores (SAG Award).
A los 62 años, de ganar el Oscar, Moore se convertiría en la sexta actriz de mayor edad en ganar en la categoría de Mejor Actriz, uniéndose a leyendas como Meryl Streep y Frances McDormand. Aunque finalmente no ganó la estatuilla, su hija Tallulah Willis compartió en Instagram una foto de Moore comiendo papas fritas en bata, con el texto «MI ganadora», capturando perfectamente el amor familiar que la rodea.
La cercanía con Bruce Willis y su enfermedad
El diagnóstico de Bruce Willis se convirtió en uno de los aspectos más conmovedores de estos años. En marzo de 2022, Willis fue diagnosticado con afasia, una enfermedad que afecta la capacidad de hablar y escribir, lo que lo llevó a retirarse de la actuación. En febrero de 2023, su condición progresó a demencia frontotemporal.
En octubre de 2024, durante el Festival Internacional de Cine de Hamptons, Moore describió el estado de Willis como «estable» y reflexionó: «Cuando uno se aferra a lo que fue, creo que es un juego perdido. Pero cuando uno se presenta para encontrarse con ellos donde están, hay una gran belleza y dulzura».
Moore reveló a la revista Variety que visita a Willis semanalmente para apoyar tanto a sus tres hijas en común (Rumer, Scout y Tallulah) como a la esposa actual del actor, Emma Heming Willis, y sus dos hijas menores. Esta dedicación demuestra que el divorcio no deshizo su vínculo familiar.
Moore elogió el trabajo de Emma Heming Willis en el cuidado de Bruce, afirmando: «Realmente creo que ella ha hecho un trabajo magistral». Su consejo a familias con pacientes de demencia fue profundo: «Cuando dejas de lado quiénes han sido, puedes permanecer en el presente y disfrutar de la alegría y el amor que hay en ellos por todo lo que son, no por todo lo que no son».
Activismo y reconocimientos humanitarios
Más allá de la actuación, en 2018, la organización Visionary Women honró a Moore con su premio inaugural Visionary Woman Award por su trabajo combatiendo el tráfico humano. En 2022, su organización Thorn identificó 824,466 archivos de material de abuso sexual infantil y 1,895 víctimas. En 2024, recibió el Courage Award en la gala del Women’s Cancer Research Fund.
Una artista renacida a los 62
Demi Moore demostró que Hollywood puede redescubrir a sus leyendas cuando estas tienen el coraje de reinventarse. Como ella misma expresó: «Estoy en un punto en el que estoy escribiendo mi propia historia, en lugar de que me la dicten en función de mi edad».
Con proyectos en marcha como la serie «Landman» (2024-presente) de Taylor Sheridan en Paramount+, Moore continúa trabajando activamente. Su legado ya no es solo el de la estrella de taquilla de los 90, sino el de una artista completa que enfrentó la adversidad, apoyó a su familia durante una crisis devastadora y logró el reconocimiento crítico que siempre mereció.
A los 62 años, Demi Moore no es una actriz en el ocaso de su carrera, sino una fuerza artística en pleno renacimiento. Su mensaje es claro: nunca es demasiado tarde para el reconocimiento, la transformación o el amor incondicional. En una industria obsesionada con la juventud, ella se convirtió en el símbolo perfecto de que la verdadera belleza radica en la autenticidad, la resiliencia y el coraje de seguir adelante sin importar lo que la vida te arroje.
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